La mañana de este jueves amaneció fresca, con un cielo despejado que prometía una jornada perfecta para recorrer el Valle Hermoso de Bustarviejo. Nuestro punto de partida fue el aparcamiento del campo de fútbol, desde donde emprendimos la marcha con un ánimo inmejorable.
Apenas recorridos 800 metros, llegamos al Manantial de la Gregoria, una fuente de agua natural con siglos de historia. Se dice que este manantial abastecía a los pastores y a los antiguos trabajadores de las canteras de Bustarviejo, que en su tiempo fueron fundamentales para la economía local. Su agua cristalina ha sido apreciada durante generaciones y aún hoy sigue siendo un punto de referencia para senderistas y lugareños.
Seguimos avanzando entre senderos rodeados de jaras y encinas, mientras el paisaje se iba abriendo a la majestuosidad de la Sierra Norte madrileña. Alrededor del kilómetro 10, nos encontramos con una de las mejores panorámicas del recorrido: las vistas al Cerro de Arcón. Esta cumbre, con su silueta inconfundible, se eleva imponente en el horizonte. Su importancia no solo es geográfica, sino también histórica, ya que durante la Guerra Civil sirvió como punto estratégico debido a su altura y dominio visual del entorno. Desde aquí, pudimos disfrutar de una vista espectacular del valle y de los picos cercanos, un momento perfecto para una pausa y algunas fotos.
Finalmente, regresamos al aparcamiento, satisfechos por la experiencia y con la sensación de haber viajado no solo a través de un hermoso paraje, sino también por la historia de la región.
El Valle Hermoso de Bustarviejo nos regaló una jornada inolvidable, combinando naturaleza, historia y vistas impresionantes. Sin duda, una ruta para repetir.
INFORMACIÓN
Realizada: 13 de febrero de 2025
Distancia: 11,05 km
Duración de la ruta: 3:50 horas
Desnivel: 252 metros
Tipo:Circular
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